Eduardo Wesley es el director de la academia de oposiciones Apolocan. Él entiende que el camino hacia obtener la plaza de una oposición es largo y lleno de desafíos. Habiendo pasado él mismo por este proceso durante diez años, conoce de primera mano las dificultades y frustraciones que enfrentan sus alumnos. Esta experiencia le permite ofrecer algo más que formación académica: un apoyo emocional y motivacional que es vital para que los estudiantes mantengan el enfoque y la determinación.

En su centro, la empatía es un valor muy importante. Eduardo se esfuerza por conocer a sus alumnos no solo como estudiantes, sino como personas con sueños, miedos y aspiraciones. Esta cercanía le permite adaptar su enseñanza a las necesidades individuales, creando un entorno de aprendizaje donde los alumnos se sienten comprendidos y acompañados en todo momento.

Eduardo ha desarrollado un sistema de planificación semanal y mensual que le permite gestionar eficazmente todas sus responsabilidades: desde la preparación de clases y la creación de contenido, hasta la atención a sus alumnos y la gestión de redes sociales.

Esta organización no solo optimiza su tiempo, sino que también asegura que los alumnos reciban una educación de alta calidad. Eduardo entiende que cada minuto cuenta, por lo que se enfoca en maximizar su eficiencia, lo que a su vez le permite estar siempre disponible para resolver dudas y guiar a sus estudiantes en su camino hacia el éxito. 

Para Eduardo, uno de los mayores desafíos en la enseñanza online es la falta de interacción visual directa con los alumnos. “Me gusta tener a los alumnos cerca porque así sé cuando cogerlos desprevenidos, hacerles preguntas para que no desconecten en la clase y además hacerla más amena”.

Sin poder ver sus expresiones o lenguaje corporal, es difícil saber cuándo los alumnos están desconectados o si han comprendido completamente el material. Para evitar este desafío, Eduardo utiliza herramientas tecnológicas con la plataforma educativa nabbü que facilitan la interacción y hacen que las clases sean más dinámicas y efectivas. 

Además, Eduardo cree firmemente en la importancia de la comunicación constante. Aunque la tecnología puede mediar la relación, él se asegura de que los alumnos sientan su presencia y apoyo, manteniéndolos comprometidos a través de preguntas aleatorias y dinámicas que los mantienen atentos y participativos, gracias a trabajar con el Aula Virtual nabbü. 

Para el director de Apolocan, la comunicación no es solo transmitir información, sino hacerlo de manera que sea comprensible y atractiva para los alumnos. Su enfoque va más allá de los tecnicismos; se centra en hacer que el contenido sea accesible y relevante, logrando que sus clases no se conviertan en simples monólogos, sino en experiencias de aprendizaje interactivo.

Eduardo reconoce que los alumnos necesitan disfrutar del proceso de aprendizaje para querer volver a clase. Por eso, se esfuerza por crear un ambiente en el que los estudiantes se sientan motivados y comprometidos, utilizando su habilidad para comunicar de manera clara y amena, haciendo que el tiempo que pasan estudiando sea valioso y gratificante.

Esperamos que la experiencia de Eduardo Wesley en la dirección de su centro de formación sea valiosa e inspiradora para otros directores y educadores en el ámbito de la enseñanza online. El enfoque de la academia Apolocan centrado en el alumno, basado en la empatía, la organización, y la comunicación efectiva, ha demostrado ser una fórmula exitosa para brindar una educación de calidad que realmente apoya a los estudiantes en sus cursos online. 

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